- Los evangelistas sintieron la necesidad de ofrecer a sus lectores los detalles de la crucifixión de Jesús. Esta forma horrífica de crucifixión era bien conocida en el imperio romano.
- La víctima tenía que cargar la parte transversal de la cruz hasta el lugar de la ejecución. Cargar la cruz completa era muy pesado. Esta procesión pública aseguraba que muchas personas fueran testigos de lo que iba a ocurrir. La crucifixión, como manera de control estatal por medio del terror, tenía el objeto de intimidar las masas para que se sometieran. La ruta que Jesús siguió fuera de la ciudad pudo haber sido posiblemente la más rápida porque la ejecución tenía que terminar antes de la caída del sol, dando comienzo al Sábado y, de acuerdo con la cronología de Juan, la primera noche de Pascua.
- Existen pocas razones para pensar que la ejecución de Jesús fue distinta de lo que era el procedimiento regular de los romanos. Al llegar a un pequeño cerro pedregoso fuera de las puertas de la ciudad, las tres víctimas fueron desvestidas y crucificadas a sus postes transversales, los cuales fueron levantados hasta los postes verticales que estaban permanentemente en el lugar de la ejecución. Las víctimas podían reclinarse en un trozo salido, aunque como la muerte de Jesús fue relativamente rápida eso no pudo haberse dado en su caso. Los pies eran clavados a través de los talones a ambos los lados de los postes verticales. Las cruces completas se levantaban aproximadamente uno o dos pies del suelo.
- Los peregrinos judíos que entraban a la ciudad para la Pascua eran recibidos por el espectáculo grotesco de hombres inmovilizados que gritaban en agonía y cuyo más mínimo movimiento causaba contracciones dolorosas por medio de las terminaciones nerviosas que acababan de ser heridas. Las ofensas graves escritas en las cruces advertían a los posibles viajeros violentos que llegaban para la Pascua que los romanos tenían un firme control. El horror de la crucifixión radica en el hecho de que, como no se dañaban órganos vitales, el dolor era prolongado por el mayor tiempo posible. Así, quienes pasaban por allí aprendían a temer la retribución de los romanos. La duración de la tortura podía haber sido regulada por la intensidad de la flagelación recibida con anterioridad y si se habían usado clavos en las dos manos y los dos pies.
- La cronología de Marcos de una crucifixión que duró seis horas parece razonable considerando las circunstancias. La muerte podía llegar inexorablemente gracias al trauma, pérdida de sangre y colapso circulatorio. Se podía acelerar por medio del procedimiento mencionado en el Evangelio de Juan, rompiendo las piernas de las víctimas.

